España ninguneó ayer a la todopoderosa Alemania de Joachim Löw en el mejor partido que ha jugado en Sudáfrica 2010. Un inesperado testarazo de Puyol supuso el 0-1 que certificó el pase de la Roja a la primera final del Mundial de su historia. Fue el broche de oro a un encuentro que la Selección Española dominó la mayor parte del tiempo.
El minuto 73 fue la clave del partido. Al igual que en la primera parte, Alemania se empezaba a recomponer de la presión española cuando se produjo un córner en su portería. Entre las torres teutonas apenas se distinguía a los “bajitos” Villa, Iniesta, Pedro, etc. Pero cuando Xavi sacó, irrumpió en el área un soberbio Carles Puyol, imparable como un tren, que se elevó por encima de todos y cabeceó el esférico al fondo de la red. España estalló de alegría en ese momento.
Ha llegado el momento de cumplir el sueño. Nos espera Holanda en la final del domingo a las 20:30h.
¡FELICIDADES Y... SUERTE CAMPEONES!
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